La sequía que azota a Chihuahua por segundo año consecutivo ha provocado una disminución significativa del 40% en el hato ganadero de la entidad, lo que representa más de un millón de cabezas de ganado menos, informó Alfonso Deandar Duarte, presidente de la Asociación Ganadera de Ciudad Juárez, quien señaló que esta situación ha obligado a los productores a migrar sus animales a otros estados de la República para evitar más pérdidas económicas.
Aunque las temporadas de lluvia pueden ofrecer un respiro, el panorama para el sector ganadero es desalentador debido a la falta de especies en los ranchos y la dificultad para repoblarlos, ya que los precios de las hembras han aumentado significativamente, lo que complica la situación para los criadores locales.
En este sentido, el Gobierno del Estado, a través de la Secretaría de Desarrollo Rural, ha desplegado un conjunto de medidas de apoyo, que incluyen la entrega de rastrojo de maíz para alimentar a los animales, la implementación de controles biológicos para prevenir enfermedades y el ofrecimiento de créditos para cubrir gastos operativos, con el objetivo de brindar una ayuda oportuna a los afectados.