La Auditoría Superior del Estado (ASE) detectó una irregularidad en el Ayuntamiento de Cuauhtémoc cuando el jefe de Recursos Humanos, de iniciales J.P.O.M., aprobó un pago de 730 mil pesos por concepto de finiquito y vacaciones a 15 regidores, la Síndica y el Presidente Municipal, a pesar de no tener la autoridad legal para hacerlo.
El auditor Hector Acosta Félix detalló que durante el proceso de análisis de la Cuenta Pública 2021 pudieron comprobar una falta grave relacionada con el desvío de recursos, ya que los servidores públicos elegidos por voto popular no están autorizados a recibir este tipo de pagos, de acuerdo con lo que establece la Constitución Local, la cual estipula que toda remuneración debe ser determinada en el Presupuesto de Egresos del municipio, lo que no ocurrió en este caso.
Acosta Félix también señaló que, a través del expediente aceptado por el Tribunal Estatal de Justicia Administrativa (TEJA) y enviado a la Cuarta Sala Unitaria Especializada, se emitió una sentencia que impuso una inhabilitación de 10 años, así como la obligación de devolver los 730 mil pesos y pagar una multa de 56 mil pesos.
