A partir de marzo, los estudiantes de educación básica, desde preescolar hasta secundaria, no podrán consumir comida chatarra dentro de las escuelas, como parte de la implementación de la estrategia nacional “Vida Saludable en las Escuelas”, que tiene como objetivo combatir la obesidad infantil y promover hábitos alimenticios más adecuados en los jóvenes.
El subsecretario de Educación en la Zona Norte, Maurilio Fuentes Estrada, detalló que desde el inicio del ciclo escolar 2024-2025, se han llevado a cabo reuniones con los directores de las escuelas, instruyéndolos a negociar con los proveedores de alimentos para eliminar productos ultraprocesados y bebidas azucaradas. Además, se advirtió que aquellos que no cumplan con estas directrices perderán la licencia para vender en las instituciones, pues la finalidad es mejorar el rendimiento académico y físico de los estudiantes.
Según la Encuesta Nacional de Salud 2022, el 40% de los infantes de entre 5 y 11 años presentan sobrepeso u obesidad, una cifra que, según Fuentes Estrada, refleja la urgencia de tomar en serio esta estrategia sin ningún tipo de flexibilidad, ya que aseguró que una buena alimentación es clave para que los niños permanezcan activos y rindan mejor tanto en sus clases como en sus actividades extracurriculares.