La Alianza Mexicana de Organización de Transportistas decidió tomar este viernes la caseta de peaje de Sacramento, ubicada en Chihuahua Capital, en ambos sentidos, como una medida de protesta contra las altas multas y los elevados costos que enfrentan, especialmente en el corredor comercial de Cuauhtémoc, lo que califican como una creciente ola de corrupción.
El líder transportista, Leonel Méndez, señaló que la presión ejercida este fin de semana pasado tenía como objetivo principal abrir un espacio para el diálogo con el Gobierno del Estado, con el fin de discutir las dificultades que enfrentan en el corredor comercial y plantear soluciones a las problemáticas que afectan gravemente su labor diaria.
Méndez destacó que la situación es cada vez más complicada, ya que deben lidiar con las infracciones impuestas por los elementos de la Guardia Nacional, División Caminos, además de los constantes robos que ocurren en diferentes puntos del país y las malas condiciones de los tramos carreteros, en particular aquellos de la red federal, lo que pone en riesgo tanto su seguridad como la de la carga que transportan.
A pesar del caos vehicular generado por el bloqueo que conecta a Ciudad Juárez con Chihuahua, autoridades de la Secretaría General de Gobierno se acercaron al lugar para comunicar a los transportistas que su solicitud sería atendida y que se buscarían soluciones para resolver el conflicto.

